¿Cómo elegir y comprar un casco?

Hay diversos factores que pueden intervenir. El diseño, por ejemplo, es uno de ellos. Pero por sobre todas las cosas, lo más importante para conocer cómo elegir y comprar un casco pasa por probárselo. Si uno no verifica el casco, ya de entrada no sabe qué es lo que está comprando. Aún así, hay diversos factores que precisamos tener en cuenta. Esto es lo que revisaremos en este artículo.

¿Cómo elegir y comprar un casco?

Tipos de casco

Hay muchos estilos de casco: Cara completa, cara abierta, medio casco, motocross y modular o abatible. Para una máxima seguridad, lo mejor es un casco integral. Es óptimo evitar los medios cascos, que están sorprendentemente aprobados por los estándares de varios países (como por ejemplo Estados Unidos), pero desaprobados para los estándares de Europa. Osea, no cuenta con una aprobación muy universal, y por ende, válida en todo el mundo.

No podemos decir cuál es el tipo adecuado para vos, pero sí considerar las ventajas y desventajas de los cascos integrales y abiertos. A algunas personas les encanta la versatilidad de un casco modular. Dicen que pueden darle la vuelta y tomar fotos, cargar combustible o usar un cajero automático sin tener que quitarse el casco. También dicen que pueden ir por ahí con la barbilla levantada para tomar aire fresco cuando hay tráfico lento.

El ajuste adecuado

Al comprar directo por Internet no es necesario que hayas comprado esa marca y modelo específico antes. Simplemente, debés tener una cinta métrica y medir el contorno de tu cabeza, empezando a la altura de la frente, pasando por la punta superior de tus orejas. Por lo general, los talles van desde el XS (53 a 54 cm) al XXL (63 a 64 cm)

Si ya recibiste tu modelo elegido o lo retiraste en un punto de venta, probate el casco para conseguir el ajuste adecuado. Debe estar apretado por todas partes sin movimiento cuando sacudís la cabeza.

Pero no te lo pongas solo por unos segundos. Debés tener tiempo para probarte el casco: podés jugar un juego en tu teléfono o revisar tu correo electrónico durante media hora. Tomará por lo menos ese tiempo para que los puntos de presión se hagan evidentes. Recordá dejarlo en el mismo estado en que lo recibiste si decidís que ese modelo no te entró, para que puedas cambiarlo.

Otra de las variantes se encuentra en preguntarle de manera online al vendedor si permite hacer una prueba de talle con los cascos usados, devueltos o modelos viejos que no se encuentren a la venta. Si es posible, retirá el casco en el punto de venta para llevártelo a casa y recostate en tu sillón a ver una película mientras lo tenés puesto. Si te duele, es porque ese modelo y talla no te corresponde.

Todo esto te ayudará a tomar una mejor decisión sobre tu consideración final.